Intolerancia a la fructosa

arrow-bold-right-padding
arrow-bold-right-padding
¿Cómo puede presentarse la intolerancia a la fructosa?

La intolerancia a la fructosa puede suceder por alguna deficiencia en su absorción o en su metabolización:

Mala absorción de la fructosa: Es un problema bastante frecuente, que afecta a entre 3 y 6 personas de cada 10. El intestino no es capaz de absorber bien la fructosa, y  aparecen síntomas como diarrea, dolor abdominal, náuseas o gases cuando se consumen alimentos que la contienen.

 

Intolerancia hereditaria a la fructosa: Es una alteración congénita que conlleva un defecto en el metabolismo de la fructosa. Cuando se ingieren alimentos con fructosa, sacarosa o sorbitol aparecen síntomas que pueden llegar a ser graves, por lo que debe evitarse completamente el consumo de estos alimentos.

Tabla informativa sobre los productos que contienen fructosa

arrow-bold-right-padding
arrow-bold-right-padding
¿Qué alimentos son ricos en fructosa?

Frutas: dátil , uva pasa, higo, uva blanca, uva negra, pera, cereza, manzana, caqui,  arándano, plátano,  kiwi, sandía, ciruela, melón, fresa y fresón,  mora, frambuesa, naranja, piña, melocotón, nectarina y albaricoque. (Ordenadas de mayor a menor cantidad de fructosa).

Productos elaborados con fructosa: fructosa pura cristalizada, néctar de agave, sirope de maíz, sacarosa o azúcar común, melaza y miel. (Ordenados de mayor a menor cantidad de fructosa).

Alimentos ricos en almidón: jarabes destinados a elaborar caramelos, salsas, bebidas azucaradas, o bebidas y harinas de soja.

Azúcar común, en forma de sacarosa.

Productos con azúcar añadido: alimentos industriales, productos de panadería y bollería, cereales de desayuno, embutidos, batidos u otros derivados lácteos aromatizados.

Aunque en menor proporción, los alimentos de origen vegetal como las verduras, las legumbres y los frutos secos.

Además de la fruta y los alimentos con sacarosa (azúcar común), otra fuente de fructosa es el sorbitol, un edulcorante muy utilizado por la industria alimentaria.

arrow-bold-right-padding
arrow-bold-right-padding
¿Es necesario tomar fructosa?

La fructosa no es un nutriente esencial, por lo que puede eliminarse de la alimentación diaria. Sin embargo, debido a que las frutas son una fuente natural de fructosa, si prescindimos de ellas podemos tener un déficit de otros nutrientes que también nos aportan. Para evitarlo, deberá optarse por seleccionar muy bien el resto de alimentos que compensen estas posibles carencias nutricionales.


Cuando se encuentra añadida a los alimentos o formando  parte del azúcar común o de la miel, su consumo debe limitarse.

La Organización Mundial de la Salud (OMS) aconseja un consumo máximo de azúcares de 25 g / día.

arrow-bold-right-padding
arrow-bold-right-padding
¿Cuáles son los síntomas de la intolerancia hereditaria a la fructosa?

•    Ganancia de peso insuficiente en los bebés
•    Episodios de deshidratación
•    Náuseas y vómitos
•    Problemas hepáticos
•    Hipoglucemia
•    Ictericia

El diagnóstico suele darse a edades tempranas, cuando se comienza a introducir la fruta y la verdura en la dieta de los niños.

arrow-bold-right-padding
arrow-bold-right-padding
¿Qué hacer si se padece intolerancia hereditaria a la fructosa?

1. Aprende a conocer qué alimentos contienen fructosa para evitar su consumo.

2. Adopta una dieta estricta sin fructosa, sorbitol u otras fuentes de fructosa.

3. Limita el consumo de alimentos como patatas, verduras, zanahorias o maíz dulce, frutos secos, derivados cárnicos con sacarosa, salsas o algunas legumbres.

4. Lee las etiquetas de todos los productos.

5. Sigue los consejos de un dietista-nutricionista.

 

Las personas con intolerancia hereditaria a la fructosa deben seleccionar muy cuidosamente los alimentos procesados ya que muchos productos de la industria alimentaria contienen fructosa dentro de su lista de ingredientes.