Desarrollo cognitivo del bebé de 4 a 6 meses: la sonrisa
El bebé ya ha cumplido 4 meses. ¡Ya no es un recién nacido! Cada vez interactúa más con el entorno, y está aprendiendo a vivir y conocer su nueva vida en familia.
La mente de los bebés es algo desconocido para la mayoría de los padres. Los bebés sienten, comprenden y piensan de manera distinta a nosotros. A medida que crecen, vamos viendo cambios que nos ayudan a entender cómo se desarrolla su pensamiento, emociones y sentidos.
La sonrisa del bebé
¿Hay algo más tierno que la sonrisa de un bebé? La sonrisa del bebé puede darnos muchas pistas sobre cómo entienden el mundo. La sonrisa del bebé se puede usar para entender su desarrollo cognitivo, pues será un indicador de su desarrollo y comprensión del entorno.
Los bebés sonríen de manera innata desde los primeros días, aunque se trata de una sonrisa refleja, sin significado aparente. Después del primer mes, sonríe de manera general a todas las personas. ¡Es una gran herramienta para llamar la atención y que todos se interesen por ellos!
En la etapa de los 4 a los 6 meses, sonríen y se ríen como reacción a la sorpresa, a sus emociones o a estímulos placenteros. Por ejemplo, jugando a esconderse, o cuando les haces cosquillas.
Alrededor de los 6 meses, hay un gran cambio. La sonrisa se vuelve específica, es una reacción a algo concreto. ¿Qué nos indica esto? El bebé distingue correctamente a las personas y decide cuándo sonreír, o qué le hace gracia. Únicamente sonreirá cuando quiera, o cuando reconozca a la persona que tiene delante.
El principio de causa y efecto y el bebé
Durante esta etapa, el bebé descubre la relación entre una acción en concreto y el efecto que provoca. Por ejemplo, si tira un objeto al suelo, hace ruido. Si agita un sonajero, suena un cascabel. O si patalea en su cuna, esta se mueve. Repetirá estas acciones muchas veces, comprobando que toda acción tiene su consecuencia.
Estos descubrimientos son realmente sorprendentes para él. El bebé suele poner caras divertidas, se agita y lanza grititos. Y, ¡cómo no! Nos regala una gran sonrisa de sorpresa al comprobar que, en efecto, cada acción tiene una reacción.
Descubre más sobre los cambios en el bebé de 4 a 6 meses aprendiendo cómo estimular el desarrollo del bebé a través de los juegos. ¡Disfruta viéndole crecer y sonreír cada día!
