¡Un nuevo miembro en la familia! Cómo prevenir los celos entre hermanos
¡Qué alegría! ¡De nuevo embarazada! Un nuevo bebé siempre es un acontecimiento para celebrar. Pero tenemos que tener especial cuidado si ya tenemos otros niños en el hogar, ya que se pueden desencadenar reacciones inesperadas.
Preparación durante la gestación:
Los meses de embarazo son un buen momento para preparar la llegada del nuevo miembro. Piensa que para tu hijo va a ser difícil perder su posición, y compartir vuestra atención y cariño con otra personita.
Antes de que llegue, puedes preparar el terreno con estos consejos prácticos para que el peque se adapte poco a poco al cambio que supone el nacimiento de su hermanito.
- Un punto importante es informar a tu hijo que estás embarazada. Involúcralo en todos los acontecimientos que vayan surgiendo para que no se sienta excluido: que toque la barriga cuando se mueva, que le hable, que le cante… Cualquier actividad es válida siempre que acepte su nuevo rol de hermano mayor.
- Si es posible, llévalo contigo a las visitas con el médico, de esta manera podrá ver a su hermanito a través de las ecografías. Es una forma de que se haga a la idea que pronto serán dos.
- Si sabes el sexo que tiene el bebé díselo para que se vaya habituando y sepa si va a ser niño o niña.
- También puedes dejarlo que participe en la decisión del nombre de su futuro hermanito, siempre con ayuda, ya que se les puede ocurrir cualquier cosa.
- Si tu hijo es pequeño y como consecuencia de la llegada del bebé va a dejar de dormir con vosotros, hazle saber que tener su propia habitación es todo un logro, ya que se hace mayor. Aplaude esta nueva hazaña para que no lo vea como un abandono.
- En el caso que le prepares una habitación al nuevo miembro, pídele opinión sobre colores y mobiliario para que podáis decorarla juntos. Se sentirá uno más y crecerá su autoestima.
- Cuando se acerque el momento del parto, explícale que tendrás que dejarlo unos días con un familiar. Tiene que asimilar que el tiempo que estés en el hospital él tendrá que ser cuidado por otra persona, y que su hermano y tu estaréis unos días en el hospital.
¡Ya está aquí el hermanito!
La alegría de tener un bebé es muy grande, pero hay que intentar evitar que se conviertan en celos que puedan perjudicar a la harmonía familiar.
- Cuando tu hijo llegue al hospital por primera vez a verte, preséntale a su hermanito. Lleva 9 meses esperando ese momento. Deja que se acerque, que lo acaricie, y si es lo suficientemente mayor, que lo coja con ayuda de adulto. Si lo separas del bebé en estos momentos, es posible que tu hijo no reaccione de manera esperada.
- Al llegar a casa haz que participe, dentro de lo posible en el cuidado del bebé. Que esté presente mientras lo alimentas, lo bañas o le cambias el pañal, y si se anima que te ayude, a su manera, con todas esas tareas.
- Si tu hijo va a la guardería, llévalo tú misma durante las primeras semanas. Así no se sentirá desplazado por el nuevo miembro de la familia y sabrá que aún te preocupas por él.
- Aprovecha cuando el bebé duerme para pasar tiempo con él. Sabemos que un recién nacido necesita toda tu atención, pero planea actividades cortas para que sepa que le sigues prestando atención.
- Si hace buen tiempo sal a pasear o al parque. El aire libre os sentará bien a todos, y te ayudará a crear nuevos vínculos familiares.
Con estas pequeñas ideas, harás que tu hijo se adapte a su nuevo lugar en la familia, y que disfrute de la nueva etapa que se le presenta.