¿Cuándo quitar el pañal?
¿Ha llegado el momento de quitarle el pañal al niño? Seguro que te habrás hecho mil veces esta pregunta.
Sigue leyendo y te daremos algunos indicios que indican que tu hijo está preparado y consejos para hacer más llevadera esta transición.
¿Ha llegado el momento?
No existe una edad ideal, pero se recomienda empezar alrededor de los dos años. Debes tener en cuenta que cada niño tiene su ritmo, y algunos pueden llegar a conseguirlo más tarde.
Que tu hijo te pida ir al baño es una buena señal, indica que el momento está cerca. No quiere decir que te lo pida y ya esté todo hecho, pero sí muestra que tu hijo tiene ganas de crecer y muestra interés por la retirada del pañal.
No amanecer mojado es otro síntoma de que empieza a controlar sus esfínteres. No todos los niños lo hacen, pero algunos empiezan antes a controlar la micción nocturna.
Otra manera de saber que empieza a ser consciente de su cuerpo y está aprendiendo a controlar su cuerpo es cuando el pañal está seco la mayor parte del día y te avisa cuando está mojado. Aprovecha para intentar retirárselo.
Consejos útiles
- Retira el pañal en verano. Tu hijo lleva menos ropa, por lo que si se le escapa es más fácil de cambiar y solventar el problema.
- Llévalo al baño tantas veces como te pida. Al principio, la mayoría de ellas no hará nada, pero en alguna sí. Anímalo, eso le ayudará para seguir intentándolo.
- Cómprale ropa interior atractiva a la vista. Puede ser de su personaje de dibujos favorito. Es una manera de motivarlo ya que intentará por todos los medios no mojarlo para que no se lo cambies.
- Si se le escapa no le riñas. Piensa que es un proceso de aprendizaje que puede ser largo. Ármate de paciencia, y lleva siempre ropa de recambio encima para los pequeños accidentes que puedan ocurrir.
- Pon un adaptador en el baño, o pon a su alcance un orinal. A muchos niños les da respeto el inodoro, por lo que esto puede servir para mitigar sus miedos, y que se anime a usarlos.
- Deja que te acompañe al baño. La imitación es la mejor manera de aprender, y la más visual. Que vea que tú lo usas, y motivarás sus ganas de hacer lo mismo.
- Si has empezado con el proceso, no desistas, retroceder en estos casos puede ser contraproducente.
Lo más importante en esta etapa es tener paciencia. No todos los niños lo consiguen en el mismo momento, por lo que respeta su tiempo, y aplaude sus avances por pequeños que sean.