Montadito, o simplemente montado
Para fiestas, cumpleaños, reuniones de amigos… o como acompañamiento para un refresco o una cerveza. Los montaditos (también conocidos simplemente como “montados”, en algunos lugares) siempre son una opción fantástica si te apetece un tentempié o si quieres ofrecérselo a tus invitados. ¿Te animas a prepararlos? Son garantía de éxito.
¿Qué es un montadito?
El montadito es un bocadillo de tamaño pequeño que se suele consumir acompañando una bebida. Se trata de un refrigerio compuesto fundamentalmente de un pan (habitualmente bollos o cortes de pan de barra) dentro del que se disponen diferentes ingredientes como embutidos, quesos, encurtidos, carne…
Son aperitivos muy comunes en los bares, aunque también se ofrecen en multitud de eventos como cócteles o celebraciones.
¿Cómo es el montadito ideal?
Como hemos comentado, el montadito es de tamaño pequeño, generalmente se consume caliente y se puede tomar en cualquier momento.
¿Cuál es el origen del montadito?
Como ocurre con muchos productos gastronómicos, el origen de los montaditos no está del todo claro, si bien en los siglos XV y XVI ya se encuentran los primeros ejemplos de pequeños panes dentro de los que se introducían (o se “montaban”, de ahí su nombre) diferentes productos. Su historia, por tanto, se remonta todavía más atrás que la de otras comidas servidas entre pan como el famosísimo sándwich (que fue ideado en el siglo VIII por el Conde de Sándwich, que le dio su nombre).
En España los montaditos han ido aumentando en popularidad con el paso de los siglos. Tanto es así que, hoy en día, prácticamente cualquier establecimiento hostelero los tiene disponibles para sus clientes.
Montaditos, canapés, pinchos, tapas... ¿en qué se diferencian?
Es muy frecuente confundir los montaditos con otro tipo de aperitivos. De hecho, existen muchas zonas en las que se utiliza indistintamente una sola palabra para nombrar a toda una gama de preparaciones que, en realidad, no son lo mismo.
Pinchos: Los pinchos constan de una única rebanada de pan sobre la que se disponen distintos productos más o menos elaborados. Se denominan así porque sus ingredientes se suelen sujetar entre sí pinchándolos con un palillo. Son muy populares en el norte de España, sobre todo en la zona del País Vasco, donde hay una auténtica cultura en torno a ellos.
Canapés: si un montadito es pequeño, un canapé lo supera. Son aperitivos de muy reducidas dimensiones que constan de una base de pan (o de algún elemento panificado) con diferentes ingredientes encima. Como decimos, son de tamaño reducido y suelen consumirse de uno o dos bocados a lo sumo.
Tapas: Las tapas, al contrario que todas las demás preparaciones mencionadas, no necesariamente están construidas sobre una base de pan. Son más bien una porción reducida de una receta, por lo que su variedad es casi infinita: podemos encontrarnos desde tapas de paella, hasta tapas de pescado, verduras, carnes… El único requisito es que vengan en pequeña cantidad.
¿Cómo hacer montaditos?
Preparar uno de estos aperitivos es, en general, una tarea muy sencilla. Nosotros te ofrecemos algunas ideas para hacer montaditos con los productos de primera calidad que puedes encontrar en los supermercados Lidl.
-
Montadito Serranito
Es uno de los más populares (tanto es así, que tiene nombre propio). Tan solo necesitas partir en dos tu pan favorito e introducir dentro una loncha de lomo de cerdo, jamón Realvalle® y, de manera opcional, pimientos verdes. ¿Suena bien? Pues te aseguramos que sabe mejor.
-
Montadito mixto
Todavía más sencillo que el anterior. Simplemente parte el pan que más te guste e introduce dentro una loncha de jamón y otra de queso (nosotros te recomendamos Roncero® para el queso y Realvalle® para los embutidos). Si quieres redondearlo, siempre puedes untar el pan con un poco de aceite de oliva. ¡Éxito asegurado!
-
Montadito de queso con pesto de tomate
Este es un poco más sofisticado y requiere algo más de preparación. Para prepararlo, corta un tomate en porciones y hornéalo a temperatura media durante media hora. Luego tritúralo con una batidora junto con medio diente de ajo, un poco de sal y perejil y 10 g de nueces peladas. Añade sal y ponlo en el pan junto con una loncha de queso tierno en lonchas Roncero®. No te pierdas nuestra receta de bocadillo de quesos con pesto de tomate.
El mundo del montadito es tan grande como tu imaginación, así que pásate por nuestro supermercado para inspirarte y crea tus propias combinaciones. ¡Tu estómago te lo agradecerá!